El 9 de Octubre de 2005 se hizo realidad un sueño, no sólo un sueño mío, sino el de muchas personas de mi entorno; mi familia, mi entrenador, mis compañeros. Se hizo realidad la recompensa a muchas horas de trabajo, de esfuerzo, de sudor.Nada parecía ser diferente a cualquier otro Campeonato, estabamos en Riga- Letonia, uno de tantos países europeos que había visitado, con nada que me resultara especialmente diferente o especial, pero sí que lo sería. Empezando porque el primer día de competición no funcionaban los marcadores, y a la organización se le ocurrio la "genial" idea, de puntuar un Campeonato de Europa con papeletas, sonaba a broma, por supuesto todos los paises se opusieron, con lo cual se retrasó un día la competición.
Yo competía el Domingo (como siempre), y el Sábado durante el primer día de competición, tuve buenas vibraciones, así que me fui a dormir tranquila. Al día siguiente aún no había nada diferente, me desperté, desayune (poco porque el día de competición no tengo mucha hambre), cogí mi mochila y me monté en el autobús rumbo al pabellón.
Mire mi sorteo y no lo tenía especialmente "facil" : Primer combate con Bielorrusia, no me resultó complicado, el primer asalto un poco "perdida" pero poco a poco me fui metiendo en la competición.
El segundo combate con Rusia, ya me sentía muy bien, veía que me salía casi todo, me encontraba rápida y fuerte.
En cuartos de final es donde se empezaba a complicar la cosa, me tocaba con la representante Italiana, Campeona del Mundo Junior hacía un par de años, jovén pero con mucha experiencia, representante de Italia en la pasada olímpiada, muy fuerte, muy fría, pero yo sentía que no tendría problema, que todo saldría bien, de hecho así fue, logré ganar, ya tenía mi puesto en el podium, pero un bronce no es nada, una vez pasada esa barrera solo se puede pensar en la final, en el oro.
En semifinales me enfrentaría con la representante Alemana, Campeona de Europa 2006, Sub-campeona de la Copa del Mundo, y un "toro", muy muy fuerte, muy explosiva. La estadística jugaba a mi favor, hacía un mes me había enfrentado a ella en el Open de Polonia y le había vencido, así que ya sabía como trabajaba.
En semifinales me enfrentaría con la representante Alemana, Campeona de Europa 2006, Sub-campeona de la Copa del Mundo, y un "toro", muy muy fuerte, muy explosiva. La estadística jugaba a mi favor, hacía un mes me había enfrentado a ella en el Open de Polonia y le había vencido, así que ya sabía como trabajaba.
Yo solo pensaba en el oro, no me podía permitir quedarme a las puertas de la final, y no fue así, volví a vencer a la Alemana, y ya estaba en la final, mi sueño estaba más cerca.La final la tuve con otra competidora fuerte, la turka, todo el equipo turko es muy fuerte, así que no podía despistarme ni un momento. Fue un combate muy muy ajustado, ibamos todo el tiempo empate, llegando incluso a la muerte súbita, al punto de oro, para darle más emoción aún de la que ya tiene una final de un Campeonato de Europa, tras unas cuantas acciones iniciadas por mi parte, pensé que estaba arriesgando demasiado pero no podía dejar que ella llevara la iniciatiba, ya que en caso de volver a quedar empatadas, el combate se lo darían a quien hubiera tenido una actitud más ofensiva, así que volví a atacar y esta vez sí que entró el punto, miré el marcador, ví que había subido y lo único que pude hacer es echarme a llorar y sali corriendo a abrazar a mi coach Elena Benítez.
No tengo suficientes palabras para describir lo que sentí en ese momento, creo que es algo que no se puede definir con palabras, hay que sentirlo. Se me pasaron muchísimas cosas por la cabeza...la primera mi madre, siempre le he dedicado todos mis triunfos, pero este era especial, y mi primera dedicatoria fue para ella, sé que siempre está conmigo aunque no pueda verla, y luego mi familia, mi club, mi entrenador Jesús Ramal, todas las personas que me han ayudado, y porque no decirlo todas las que me han puesto baches en el camino también.
Sentí muchísimo no poder compartir ese momento con Omar, ya que por problemas políticos no pudo asistir a este campeonato, pero fue la primera persona a quien llame, ya que a él tengo mucho que agradecerle también
A partir de este momento todo fueron lagrimas de alegría, y no poder quitarme la sonrisa de la cara en mucho tiempo.
Se había cumplido un sueño, me había llegado la recompensa, había conseguido ser CAMPEONA DE EUROPA.
